14.1.09

David Cerny



Leo que 'La República Checa ha tomado la presidencia de la Unión Europea durante los próximos seis meses y por este motivo, como marca la tradición, ha instalado una obra destinada a dejar su huella en el gran atrio del edificio Justus Lipsius donde se reunen los veintisiete ministros. Los checos han optado por una exposición que representa de manera esquemática los estereotipos de los veintisiete países de la UE.'

Para ello encargaron al artista checo David Cerny crear una obra con la colaboración de un artista de cada uno de los países miembros de la Comunidad Europea. Pero ha resultado ser un engaño ya que lo ha hecho él junto con un par de amigos.

Este mural de los tópicos que ha recibido el nombre de Entropa los belgas sólo comen chocolate y los suecos viven en una caja de Ikea. Italia ha sido representada con su mapa convertido en un campo de futbol y los jugadores sujetando balones con sus genitales para criticar el sistema autoerótico de un país obsesionado por este deporte. Francia es vista como el país más propicio para un huelga y lo representa como un cartel que anuncia GRÈVE. La silueta de España aparece completamente recubierta por cemento y en la parte superior se ve una enorme hormigonera roja y blanca, en una alusión nada velada a los excesos urbanísticos. La obra se achacaba a un inexistente Ricardo Romeo. ¿Y Holanda?


Los Países Bajos aparecen sumergidos bajo el mar y sólo sobresalen las minaretes de las mezquitas. Luxemburgo aparece con el cartelito de 'se vende'. Bulgaria esta retratada como un váter turco y Rumanía aparece como un parque temático del conde Drácula. Los checos se han dibujado a ellos mismos con una especie de cartel electrónico en el que aparecen los comentarios de su presidente, Vaclav Klaus, sobre el mundo y la Unión Europea. En la parte correspondiente al Reino Unido no hay nada, en alusión a su tradicional euroescepticismo.

Cerny, el autor del mural, ha aclarado que se ha contado con un artista de cada país para representar el estereotipo de su nación. Con esta iniciativa, el artista checo quiere “demoler las barreras y los estereotipos y eliminar los obstáculos a la cooperación que todavía persisten”. Pero todo ha sido una farsa de David Cerny, al fin descubierto por su zafiedad. Ha costado 50.000 euros en concepto de alquiler y la presidencia checa duda sobe su futuro.

Si eres amante del arte mejor te des una vuelta por el nuevo servicio de Google Earth sobre el Museo del Prado

http://www.google.nl/intl/nl/landing/prado/

si es que aún no está tapiado por el hormigón...