¿Avión o jaula?
En blogs anteriores ya me he quejado de las incomodidades de viajar en avión. En los primeros tiempos de los vuelos comerciales el cliente tenía la sensación de que era el rey. El personal de a bordo procuraba que el viajero fuera lo más cómodo posible; lo mimaba. Vaya contraste con hoy día. Los retrasos son estructurales. Normalmente informan de ellos y de sus causas cuando ya estás sentado en el avión. El espacio entre asientos se ha ido reduciendo con lo que cada vez es más incómodo. En viajes de larga duración es una tortura. Se han terminado las comidas y bebidas gratuítas y has de pagar hasta para respirar. Las consumiciones se pagan a precios de escándalo.
Pues ahora la Organización Mundial para la Salud (OMS) nos alerta del llamado 'síndrome del viajero' provocado por la falta de movilidad en los desplazamientos y que puede derivar en trombosis. Los consumidores critican la falta de información y medidas preventivas. Os recomiendo la lectura del blog de MARÍA R. SAHUQUILLO publicado hoy en el diario El País.
La cuestión es que por si todo esto no fuera poco leí ayer que la compañía de vuelos de bajo precio Raynair está estudiando eliminar asientos para que así algunos viajeros puedan estar de pie lo cual permitiría embarcar a un mayor número de pasajeros.
Lo importante es recaudar más dinero. El viajero que se joda. (con perdón)
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