La Tomatina de Bunyol
La pequeña localidad de Bunyol, provincia de Valencia, celebra desde hace 61 años, las fiestas dedicadas a San LLuis Bertrán y la Virgen de los Desamparados de forma original siendo el punto culminante la llamada Tomatina !
Esta fiesta, que tiene lugar cada último miércoles de agosto y recibe la visita de decenas de turistas procedentes de todo el mundo, consiste en una frenética batalla de tomates. El escenario es la estrecha calle del Cid que tiene una longitud de 400 metros por lo que es muy difícil esquivar el tomatazo. Dura de las 1o a las 13 horas.
De buena mañana las tiendas y los vecinos protegen las ventanas con plásticos para preservarlas del 'puré' de tomate que se va formando durante la batalla. Los participantes suelen ir protegidos con una camiseta, pantalón corto y unas gafas protectoras. A las mujeres les recomiendan ponerse un traje de baño bajo la camiseta.
Previo al inicio de la Tomatina hay un concurso que consiste en coger un jamón clavado a lo alto de un palo debidamente engrasado con jabón para dificultar el empeño. Tan pronto alguien lo logra la masa grita "tomaaateeees'. Entonces entran en el pueblo 6 camiones cargados de tomates y depositan su carga en la plaza del pueblo. Este año se necesitaron 140.000 kilos de tomates de pera extra maduros para regocijo de los 30.000 participantes.
Previo al inicio de la Tomatina hay un concurso que consiste en coger un jamón clavado a lo alto de un palo debidamente engrasado con jabón para dificultar el empeño. Tan pronto alguien lo logra la masa grita "tomaaateeees'. Entonces entran en el pueblo 6 camiones cargados de tomates y depositan su carga en la plaza del pueblo. Este año se necesitaron 140.000 kilos de tomates de pera extra maduros para regocijo de los 30.000 participantes.
Parece ser que la Tomatina se originó en el año 1945 durante un desfile de "gigantes y cabezudos" en la plaza del pueblo. Algunos jóvenes querían participar en la comitiva y por eso golpearon a algunos de los hombres. Rápidamente muchos de los participantes comenzaron a pelearse entre sí. Al año siguiente se encontraron otra vez para seguir la batalla con tomates.
Hasta 1959, la Tomatina estuvo prohibida, y no recayó en manos municipales hasta 1980. Esto presupuso que los habitantes ya no habían de traer los tomates de su casa si no que el ayuntamiento corre con los gastos de su 'importación' Hoy en día posee un apartado propio en todos los catálogos turísticos y desde el 2002 ha sido declarada fiesta de Interés Turístico.
Tras la batalla hay que limpiarse por lo que se habilitan una serie de duchas en el polideportivo de la localidad y en la zona conocida como «La Jarra». Luego todos los guerreros colaboran en la limpieza del pueblo.
Otra actividad que cada año gana más popularidad es la fiesta que se organiza la noche anterior a la Tomatina y que se conoce como "La Empalmà" Los participantes pueden asistir a varios conciertos y se preparan bailando, bebiendo y cantando para la lucha del día siguiente. Y desde luego, sin pegar ojo.
Alguien ha definido la Tomatina como:
Descargar adrenalina lanzando tomates maduros a todo el que se mueva. Una batalla legal y posible durante un solo día y en la que cada año participan más guerreros.
Pues un amigo mío, el que me alertó sobre esta fiesta, me cuenta que esa actividad tiene una gran tradición en la comunidad valenciana y, aunque no es cruel, no es manca. Dice conocer a gente sensible y culta que sin la Tomatina no podría vivir. Ahí queda eso.
Otra tradición que nadie sabe porque se levantó la prohibición. Con tanta gente muriendo de hambre en el mundo nosotros nos reafirmamos en nuestra cultura ya que eso reflejan nuestras fiestas y tradiciones...
¿de la FET y de las JONS?
1 Comments:
Tu escripción es perfecta, amigo Antonio, pero cobraría tintes más reales si éste próximo verano te veo participando en ella. Mis posibilidades no son para lo mismo, pero verte no me lo pierdo.
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