12.7.07

Prêt à porter de condones



Los publicitarios, desde siempre, nos han intentado comer el coco para que compremos lo que ellos quieren. Incluso se admite que no digan la verdad. En eso se parecen a los políticos, sobre todo a los PePeros, aunque en publicidad la mentira no se considera una inmoralidad. Recuerdo el eslogan, 'Donde no hay publicidad resplandece la verdad'.

El primer anuncio que recuerdo fue el de Philips, en una época que no había aún televisión, por lo que la radio, la prensa y los locales públicos como el metro, los campos de futbol o los cinemas, eran los medios más empleados. La genialidad del fabricante de bombillas consistió en dar con una frase de fortuna:

- Oiga, oiga.
- Qué.
- Que sean Philips

Todo el mundo hacía la broma por la calle, sobre todo los chavales, dirigiéndose a cualquier persona con el, oiga, oiga. Con ello se puso de manifiesto que este método, además de baratísimo, es uno de los más efectivos que se han empleado. Me gustaría saber quien fue el que tuvo esa idea feliz.

Durante mi carrera profesional tuve ocasión de seguir cursos de técnicas de venta, publicidad y marketing y recuerdo las advertencias que hacían sobre los fallos a evitar que ilustraban con recortes de la publicación para demostrar que eran auténticos. Uno muy gracioso era un anuncio por palabras que decía: SE EMPAPELAN HABITACIONES A DOMICILIO. Esto si que es servicio ya que, la verdad, no me veo capaz de llevar mi habitación a casa de otro...

Pero el mejor, sin duda, es el siguiente:
SEñORA, NO MÁS POLVOS NI MÁS LECHES, PARA LA MUJER MODERNA UN POLVO MODERNO: POLVOS ÁNGEL. Los de mi generación conocen esta publicidad de una firma de cosmética muy famosa.

Todos estos recuerdos me han venido hoy al leer que los modistas chinos diseñan trajes hechos con preservativos para fomentar el uso de los profilácticos entre la población.

Hoy día seguro que los polvos Ángel habrían añadido el preservativo a su eslogan.