La Risoterapia

Por fín he encontrado a alguien que se toma la risa en serio, es decir, como terapia contra nuestros males. Se trata de Katy García, de profesión risoterapeuta.

En una entrevista del periodista Amela de La Vanguardia de Barcelona desvela datos muy curiosos como el de que los niños ríen unas 300 veces al día mientras que un adulto apenas tres. La culpa dice que la tiene la educación que penaliza la alegría, fomenta la seriedad por lo que a los 40 tenemos todos los números para un infarto.

La razón de suprimir la risa reside en el hecho de que es más fácil someter a una persona triste que a una que ríe. Asegura que hoy en día hay pruebas de que matar la risa es matar la salud.
Después de haber reído a gusto, todos nuestros registros vitales mejoran: desciende el colesterol, aumenta la oxigenación de la sangre y del cerebro, se limpian mucosas, se masajean cien músculos internos... Si hace tiempo que no ríe puede llegar a tener agujetas si se ríe mucho.

La risa libera además endorfimas, sobre todo la dopamina y la serotonina.
En análisis a suicidas se ha visto que estaban sin serotonina!
A las mujeres les conviene saber que diez minutos de buena risa equivale a una hora de masajes!

Lo que más me ha impactado es que Katy García quiere fomentar el parto con risa lo cual me parece muy loable, ya que es precisamente algo muy doloroso, aunque no especifica como hay que llevarlo a la práctica.
Me imagino los quirófanos dotados de una instalación estereofónica para poder escuchar unos chistes del finado Eugenio. Después de unos cuantos chascarrillos romper aguas será todo uno. Luego cuando nazca la criatura el problema será que la madre se entere de si es niño o niña porque las carcajadas impedirán oir a la comadrona.

Es niñaaaaaaaa! “El saben aquel…” (pulsar sobre Eugenio)
Me parto de risa.